España y el riesgo de volver al pasado

España se expone a regresar al pasado en el caso de que no cambie lo antes posible de paso. Después de las gloriosas campañas de 2008, 2010 y 2012, donde ha paseado por Europa y por el Mundo como una Armada Invencible, un acorazado que destruía puntualmente a quien se enfrentase a ella con un fútbol bello, ofensivo, divertido; siendo finalmente una mezcla de todo el país sin divisiones regionales; siendo digna de los dos mejores clubes del mundo que desde tiempo atrás hacían lo mismo en el ámbito de competiciones de clubes; después de todo esto, decíamos, se expone a volver al pasado oscuro de antes de 2008, confirmando la pésima imagen ofrecida en el Mundial brasileño.

En realidad la más grande conquista de esta España ha sido precisamente tener el espíritu de club. Era el equipo de todo el país, unificaba con su clase y espíritu ganador divisiones sociales profundas, que quedaron atrás por la belleza del juego de "La Roja" y por los magníficos resultados obtenidos por años y años. Esta España con actuaciones opacas como estas, frente a Italia y Rumanía, al margen de los resultados o también de las excusas del periodo pascual que no es motivador para los jugadores que ya tienen una marea de partidos oficiales para disputar, se expone a desenamorar a la afición y esto sí, más que cualquier otra cosa, puede ser muy grave. "La Roja" ha tardado una vida en convertirse en el espejo de una nación nunca completamente unida que lo ha estado efectivamente en torno a su selección de 2008 a 2012. Este legado no se puede perder. Se debe pasar página rápidamente después de los sucedido en el Mundial de 2014 y para esto se necesitan actuaciones mucho más convincentes que las dos últimas.

Las bases ya están puestas. Muchos campeones, un gran seleccionador. Parece que no falta nada para poder defender de la mejor manera el estatuto de vigente campeón de Europa. Pero hace falta que rápidamente quien vista la camiseta de "La Roja" sienta que lleva encima una camiseta histórica, ganadora, con un peso y una responsabilidad que debían ser siempre iguales a la del Madrid o la del Barça cuando juegan en Europa. Nada más que eso. Comenzar a perder sería el primer paso hacia un pasado oscuro que nadie quiere. España ha ganado los últimos dos Europeos, es la vigente campeona. Esto debería bastar para hacer que quien la defienda se sienta ganador y que tenga toda la motivación para honrar los títulos que defiende. Más que crisis de juego o de futbolistas, esta puede ser una pequeña crisis de motivación y esto en España no puede suceder porque si la gente comienza a desenamorarse de nuevo de "La Roja" todo el trabajo hecho y que ha costado tanto obtener puede perderse de manera peligrosísima. Personalmente creo que si debían suceder estas actuaciones decepcionantes, han llegado en el momento adecuado porque hay tiempo por delante para cambiar el paso y afrontar el Europeo con el orgullo de quien quiere conquistar el tercer título consecutivo