Bellingham pasa del infierno al cielo y lleva al Real Madrid al liderato
El Real Madrid llegaba a Mestalla con el objetivo de ponerse líder de LaLiga en solitario entre ceja y ceja. El partido no pudo empezar peor: mal juego y gol del Valencia a la media hora del encuentro. El conjunto blanco no generaba apenas peligro, y el cuadro che estaba muy cómodo en el terreno de juego. Sin embargo, aunque tras el descanso no cambió mucho el fútbol, el equipo de Ancelotti se encontró con un penalti para empatar el partido.
Bellingham fue el encargado de ejecutarlo, pero como le pasó a Mbappé en San Mamés y en Anfield, el inglés falló y en esta ocasión mandó el balón al poste. Tras esto y la roja a Vinicius, parecía que el partido se ponía muy complicado, pero aún estando con diez jugadores, Modric empató y el Real Madrid se vino arriba. Jude deja siempre un esfuerzo innegable y fallar el penalti había sido demasiado cruel para un jugador que siempre da el 200% en todos los partidos.
El británico siguió creyendo hasta el final, continuó presionando como lo había hecho desde el primer minuto y eso provocó el error de Hugo Guillamón al final del partido. El pase a su portero se quedó corto, y Bellingham en el mano a mano ante Dimitrevski no perdonó, anotando su sexto gol en los últimos ocho partidos, y culminó una remontada épica ‘made in’ Real Madrid.